Si hay otro producto típico de esta época del año es el boniato. Personlmente me parece un tubérculo que podemos usar más en nuestras recetas de lo que acostumbramos a hacer. En esta ocasión lo he cortado y frito en un aceite con un toque de jengibre. De esta manera enriquecemos en sabor una receta de pollo con toques indios, donde la combinación de culturas y sabores la llevan a sorprender. Una receta que gusta a los pequeños de la casa y que resulta elegante en una cena entre amigos.
Ingredientes :
- Pechuga de pollo
- Arroz salvaje
- Boniato
- Cebolla y pimientos de colores
- Cúrcuma, raiz de regaliz, cayena y jengibre.
Elaboración :
Cortamos la cebolla y la ponemos al fuego con un fondo de aceite. Incorporamos los pimientos, unos los cortamos y otros los dejamos enteros, tenemos así la posibilidad de saborearlos más intensamente.
Añadimos las pechugas de pollo cortadas, las integramos, añadimos cúrcuma,cayena y la raiz de regaliz. Dejamos al fuego.
Mientras se está haciendo el pollo al fuego, cortamos el boniato y lo freimos con aceite que no esté muy caliente. Antes de freir el boniato, corto un trozo de jengibre y lo frio en el aceite, a baja temperatura para que no se deterioren las características del aceite mientras integra el sabor del jengibre.
Vamos cociendo el arroz en agua hirviendo con sal, una vez cocido reservamos.
En este punto solo nos queda unir todos los pasos anteriores, el arroz con el pollo y su salsa, y al final incorporamos los boniatos. El resultado una mezcla de sabores y culturas que hacen a este plato diferente. Podemos servir el arroz y el pollo cubriéndolo con la salsa y que se integren en el plato, o integrarlos antes de emplatar.
WM dice
presentacion muy rustica, pero el plato debe estar benisimo!