Ayer celebramos una barbacoa en casa, entre los platos fríos que me permitieran estar en el jardín pendiente de la barbacoa se me ocurrió realizar este pastel de pollo, una versión de los tradicionales sandwiches de pollo. Una receta cómoda para las cenas de verano donde la comida fría forma parte del encanto y la informalidad del momento.
Ingredientes :
- Pechuga de pollo
- Pan de molde blanco
- Mayonesa
- Aceitunas de manzanilla sin hueso
- Lechuga y tomate
- Queso en loncha
- Aceitunas negras para decorar.
- Romero, tomillo y orégano.
Ponemos las pechugas al horno una vez las salpimentamos y especiamos, las vamos regando con AOVE. Cuando estén cocinadas las cortamos pequeñas. Cortamos los tomates y la lechuga, picamos las aceitunas y lo mezclamos todo con la mayonesa, a la cual le unimos parte del aceite en el que hemos asado el pollo.
Vamos montando el pastel, os he comentado que eramos muchos, por lo que puse doble ancho de pan. Ponemos el queso y el relleno que hemos preparado anteriormente. Hacemos dos capas y envolvemos todo en mayonesa, picamos las aceitunas negras y decoramos.
Conservamos en la nevera, y servimos frío. Es una receta muy sencilla, con un toque diferente por el sabor del pollo, como os decía al principio perfecta para acompañar las barbacoas de las noches de verano.
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