Si miramos la receta tradicional de Musaka se realiza con carne de cordero picada, por lo que he dudado si llamar a este plato musaka o no, mucho hay escrito sobre esto. Así como la salsa que la envuelve en este caso es una bechamel con nuez moscada y en las recetas originales encontramos una salsa de yogurt y queso feta con toques de canela. Esta se parece más a la versión griega de este plato. Tambien podíamos llamarlo una lasaña de berenjenas alejándonos así del concepto de musaka y su origen, ya que nos vamos a un plato Italiano frente al orirgen balcánico que se atribuye a la Musaka. Esta reflexión la he tenido antes de poner el nombre a este post, de un plato con berenjena, ternera picada, bechamel y queso, que con diferente tipo de carne se hace como una Musaka griega.
Ingredientes:
- Berenjenas
- Carne de ternera picada
- Cebolla y tomate frito casero.
- Comino, tomillo y romero
- Queso para gratinar, yo uso mezcla de cuatro quesos
- Bechamel : mantequilla, harina, leche y nuez moscada
Elaboración :
Ponemos la cebolla cortada en un fondo de aceite, cuando se vaya pochando añadimos la carne. Una vez tome color incorporamos unas cucharadas de tomate frito. Yo suelo cocinar el tomate frito en cantidad suficiente y lo tengo congelado para estos platos, sino lo realizo en el momento. Salpimentamos y especiamos con comino, tomillo y romero.
Mientras cortamos la berenjena y pasamos por una sartén con aceite, las dejamos en una bandeja con papel absorvente para que elimine el aceite sobrante.
Realizamos la bechamel con nuez moscada.
A continuación montamos el plato, una capa de berenjenas, la carne y la bechamel, repetimos este paso dos veces y terminamos con una capa de queso. Introducimos en el horno y esperamos a que el queso se dore.
Cuando relizamos un plato de berenjenas fuera de temporada podemos arriesgarnos a no encontrar berenjenas de calidad y que notemos la piel un poco dura, es uno de los factores que tenemos que tener en cuenta en este plato a la hora de cocinarlo.
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